Imposibilidad de enderezar lo torcido

Con una cultura dominadora que impone la falsedad de sus monigotes ya no se le puede devolver al arte la inocencia creativa, su libre ejercicio espiritual. Y ante tal imposibilidad de enderezar lo torcido, la única salida de combate ha de ser entonces una crítica despiadada y de carnicería analítica en el tratamiento de los temas.