«Todo lo que escribo está cargado de dinamita. Mientras tenga fuerza y entusiasmo cargaré mis palabras con dinamita. Sé que mis verdaderos enemigos, los tímidos y los arrastrados, no se enfrentarán a mí en un combate justo. Sé que la única forma de entrar en contacto con ellos es alcanzarlos desde dentro, por el escroto, tiene uno que subir por dentro y retorcer sus sagradas entrañas» Henry Miller
12 de diciembre de 2014
parlando el lenguaje de Esopo
El
máster Pepe Revueltas afirma que en el momento en que la razón se
disfraza, parlando el lenguaje de Esopo, los filósofos han de
convertirse en perros, caballos, elefantes o cabrones que hablan y
piensan antropomórficamente a través de una «crítica» elusiva,
indirecta, pusilánime y complaciente. Ascesis de escribir sin decir nada
o puerta abierta al oportunismo, la doblez y la ambigüedad: el escritorzuelo,
articulista o gacetillero, mediante imposturas y falseamientos, se
sirve de dicho lenguaje; y cuando es llamado a moverse teóricamente, lo
hace aplicando groseras fórmulas anfibológicas o lanzando lisonjas de
filisteo con el fin de acomodarse u obtener la prebenda de rigor. De esa
manera, su «crítica» merece ser leída o escuchada, se vuelve glorioso
ejemplo y se acepta el meritorio discurso porque se ha desprendido del
«núcleo racional» —transustanciándose en una «crítica-acrítica»— en la
que prevalecen únicamente los raseros de la «superestructura emocional»,
de una conciencia vacía de contenido que opera con el puro entusiasmo o
el optimismo. Entonces, se logra el propósito de que las palabras ya no
digan nada. Como afirma Revueltas: «Las palabras pierden por completo
la significación que indican, como ocurrió con la ideología cristiana
por los tiempos en que el agitador Savonarola intentó restituir las
vaciadas significaciones a la pureza original de su antiguo contenido.
La horca hizo pagar a Savonarola su osado proyecto de arrancar a la fe
religiosa de su optimismo y complacencia ideológicos, y las palabras
continuaron vacías» [Dialéctica de la conciencia, libro 20, p. 225].
Francisco Morales en la dote cultural de nuestras miserias locales
Y el poeta, compinchado en la rémora de las instituciones cultureras del gobierno empresarial (IMAC, CONACULTA, FONCA, ICBC, CECUT), proporc...

-
Y el poeta, compinchado en la rémora de las instituciones cultureras del gobierno empresarial (IMAC, CONACULTA, FONCA, ICBC, CECUT), proporc...
-
La función cultural de la mayoría de los artistas y escritores que han emergido —con más precipitación que talento— es de escaparate y apari...
-
Y, a vuelco de impresiones y adjetivaciones inútiles, y con muy poco sentido de proporción estética, el protopoeta se sumerge en una ensoñac...